Cabezera

Cabezera

jueves, 26 de abril de 2012

Los ERE rompen la tregua

Andalucía / fraude en empleo

Los ERE rompen la tregua

La actuación de la Junta en la defensa de Fernández saca de nuevo a la luz fracturas en el PSOE andaluz

Día 26/04/2012 - 01.58h

Las consecuencias del escándalo de los ERE no solo se están dejado notar en la estructura institucional de la Junta de Andalucía sino que también se están manifestando en un PSOE regional en aparente calma tras la contra todo pronóstico «dulce derrota» de su candidato José Antonio Griñán en las pasadas elecciones andaluzas. El partido, sin embargo, es una balsa de aceite sólo en la superficie, por cuanto las profundas divisiones entre «oficialistas» y «críticos» se han reabierto con la entrada en prisión del exconsejero de Empleo, Antonio Fernández, en particular, y con la gestión de la Junta en el caso, en general.
No es extraño que las costuras hayan vuelto a saltar en Cádiz, provincia natal del exconsejero, y en la que militan algunos de los más destacados críticos a la gestión de Griñán, como el también exconsejero Luis Pizarro —«mano derecha» en el partido del expresidente Manuel Chaves— y el secretario provincial, Francisco González Cabaña. Ambos tomaron partido en el pasado congreso federal del PSOE por Alfredo Pérez Rubalcaba, frente al que tomó Griñán por Carme Chacón. Dos opciones que, más allá de la preferencia por uno u otro candidato, evidenciaban la existencia en el partido de un sector oficial afín a Griñán y otro crítico que añoraba el PSOE de Chaves y Pizarro.

Críticas de Pizarro

El hecho de que el PP no consiguiera la mayoría absoluta para gobernar la Junta libró al final al PSOE de afrontar su mayor crisis interna en Andalucía, aunque las divisiones, lejos de disolverse, se habían dejado, eso sí más atenuadas, para más adelante, esto es, para el congreso regional. Pero el caso de los ERE y la encarcelación de Fernández han hecho saltar por los aires esa aparente calma.
En el entorno de Griñán siempre ha trasladado de forma extraoficial que los ERE son una carga del pasado para un presidente que ni tan siquiera ha podido cesar a algunos de sus responsables. Pero el presidente en funciones era responsable, como consejero de Economía entre 2004 y 2009, de la Intervención que debía velar por la legalidad del proceso y, además, aumentó el denominado «fondo de reptiles». Quien mejor resume este pensamiento es la consejera de Presidencia, Mar Moreno, quien aseguró que los ERE son un «caso del pasado», que «no afecta al Gobierno saliente y mucho menos al futuro Gobierno». Esa actitud ha debido gustar muy poco a Luis Pizarro, quien criticó ayer la intervención del abogado de la Junta, al entender que no ha defendido unas políticas «que han resuelto muchos problemas con el empleo en Andalucía». Muy pronto le replicó el consejero de Gobernación y hombre de Griñán en Cádiz, Francisco Menacho, quien defendió que el abogado de la Junta ha actuado guiado por «criterios técnicos» y en ningún caso por «argumentos políticos».
Sin embargo, lo que subyace en este cruce de declaraciones son «argumentos políticos» sobre si las responsabilidades de los ERE son solo cosa de gabinetes del pasado o afectan también al actual presidente. En cualquier caso, esta cuestión reabre la crisis en Cádiz, donde el sector crítico con Griñán ha firmado al 80% un manifiesto en favor de Fernández, al que denomina «represaliado político». La secretaria de Organización del PSOE-A, Susana Díaz, no quiso echar más leña al asunto y se mostró comprensiva con las muestras de afecto de los compañeros de Cádiz. Diplomacia para que no se reabran más aún las antiguas heridas en plena negociación con IU para formar Gobierno.

El 84,9% de IUCA apoya entrar en el Gobierno andaluz

No hay comentarios:

Publicar un comentario