Salud premia a directivos con 1,2 millones mientras baja los sueldos
La cúpula del SAS comenzará a cobrar el plus de productividad en unos días, justo cuando se recortan los salarios de la plantilla
La
Junta aprieta el cinturón de un modo selectivo. El mensaje que están
lanzando los trabajadores de la sanidad pública de que ellos son los
principales perjudicados de los recortes
y que, sin embargo, los emolumentos, cuando no prebendas, de los altos
cargos siguen intactas, tiene más razón de la que quieren concederle los
gestores del Servicio Andaluz de Salud
(SAS). Porque el plus de productividad con el que la Consejería de
Salud premia a sus directivos por la consecución de objetivos se va a
comenzar a pagar en julio, justo cuando los recortes al grueso de la
plantilla del SAS se hará efectiva.
Fuentes oficiales de la Delegación de Salud de Córdoba
confirmaron ayer a este periódico que la política de pluses de
productividad no sufrirá variaciones este ejercicio, cuando los altos
cargos ingresarán 1,2 millones de euros correspondientes al cumplimiento
de sus obligaciones profesionales del año 2011. La única medida de
contención financiera que ha determinado Salud en relación a los pluses
es que, a diferencia de los ejercicios anteriores, en éste no se
cobrarán en un solo pago, sino prorrateados en seis meses. Pero las
cantidades no sufrirán variación, indicaron las fuentes sindicales
consultadas por este periódico.
Complementos
Otra
cuestión es si estos complementos salariales se verán modificados en
los pagos que se ejecuten en 2013, y que premiarán el trabajo que se
desarrolle este año. Las citadas fuentes sindicales indicaron que
algunos directivos les han transmitido que la rebaja de los pluses
rondará el diez por ciento, de manera que la cantidad total que la
Administración autonómica desembolsará en Córdoba el próximo año por
este concepto no bajará del millón de euros.
Por
su parte, el PP cordobés criticó ayer duramente al cogobierno de la
Junta por situar como un pilar de su plan de ajuste el recorte de
salarios a los trabajadores públicos. Rosario Alarcón y Adolfo Molina,
parlamentarios andaluces populares por la provincia, arremetieron contra
esta decisión.
Los sindicatos temen ver reducidos más sus pluses
Y
explicó que el PP tiene un paquete de iniciativas, que iba a abordarse
en el Parlamento entre ayer y hoy —al cierre de esta edición aún no
había comenzado su debate—, para «controlar y reducir» el gasto del
Ejecutivo de Griñán. Defendió que, de llevarse a cabo, evitaría tener
que menguar los emolumentos de los trabajadores públicos de la Junta en
los citados 770 millones. Destacó que estas medidas servirían también
para «acabar con la grasa política». Se refería a la famosa Administración paralela.
Rechazo del PP
Por
si había duda, Alarcón se refirió abiertamente a ella. Denunció que los
socialistas e IU darán el «tijeretazo» a los salarios públicos para
«costear 35.000 puestos de trabajo de la Administración paralela, los
enchufados del PSOE». La también portavoz adjunta del PP en el
Parlamentodefendió que «hay que reconducir» la práctica del Gobierno
andaluz de crear un entramado público «opaco y poco eficiente», que, a
juicio de los populares, ha ido «en detrimento» de la Administración
propiamente dicha y ha elevado el gasto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario