El exinterventor implica a todo el Consejo de Gobierno de 2003
Día 25/07/2013 - 18.48h
El imputado dice que «era impensable» que Griñán no conociera lo que estaba pasando
La declaración del exinterventor de la Junta de Andalucía
sigue ante la juez Mercedes Alaya y va subiendo de nivel ya que ha
implicado a todo el Consejo de Gobierno. Según los abogados presentes en
la declaración, Manuel Gómez, imputado de dos delitos de prevaricación y
malversación, ha asegurado que «era imposible» que Griñán no supiera
la existencia de un procedimiento inadecuado. Pero además el
exinterventor ha ido más allá al implicar a todo el Consejo de Gobierno
del año 2003, que entonces estaba presido por Manuel Chaves.
Durante su declaración, que ahora ha sido interrumpida para comer, Gómez ha asegurado que hubo un acuerdo del Consejo de Gobierno en el año 2003 en el que pidieron a la Intervención que analizara los expedientes
de las transferencias de financiación para que observaran lo que estaba
pasando, lo que supone que Chaves y su Gobierno tenían conocimiento de
algo anómalo en las transferencias de financiación, el sistema empleado
para dar las ayudas.
En cuanto a Griñán, Gómez ha asegurado ante la juez que era «abolutamente impensable» que
el consejero de Hacienda no tuviera conocimiento de lo que estaba
pasando» ya que se detectó un desfase presupuestario de 93 millones de
euros en el año 2005 referente a los años 2003 y 2004.
De hecho, el exinterventor ha calificado lo que ocurrió
durante diez años con los pagos de las ayudas a través del método de las
transferencias de financiación como «una patología presupuestaria».
En este sentido, fuentes judiciales han explicado que el exinterventor
ha dicho que si se encontraba un déficit, por ejemplo, en la Consejería
de Salud, era normal porque ese déficit existía en toda la Consejería
mientras que, en el caso de Empleo era muy concreto porque ese déficit sólo existía en la Dirección General de Trabajo.
Gómez también ha reconocido ante la juez Alaya que durante
el pasado año se reunió con la consejera de Hacienda, Carmen Martínez
Aguayo, para manifestarle «su más enérgica protesta» porque le
estuvieran imputando a él desde el Gobierno.
La declaración de Manuel Gómez se prolongará todo el día.
En la sesión de mañana ha ratificado tanto lo que dijo a la Guardia
Civil como la carta que escribió al presidente del Parlamento en una
carta titulada «Divinas palabras» en noviembre pasado. En esa misiva
Gómez acusaba a Griñan de cebar sin descanso la partida presupuestaria de los ERE
y también que el nido de corrupción se hubiera desmontando en
veinticuatro horas con una orden verbal. De hecho la juez le ha
preguntado por esa frase concreta en la que aseguró que Griñán cebó la
partida de los ERE. A lo que Gómez ha contestado afirmativamente.
Otro punto álgido de la declaración, que ha provocado un
debate de derecho administrativo entre la juez y el exinterventor, ha
llegado cuando la juez ha dado por hecho que Griñán conocía la
existencia de los informes que avisaban de que el procedimiento era
inadecuado. «Sabemos que el consejero de Hacienda conocía los informes que ustede emitía», ha dicho Alaya antes de formular una pregunta. El interrogatorio sigue.
No hay comentarios:
Publicar un comentario