La pobreza aumentó en Andalucía el doble que en España con la crisis
Día 16/05/2013 - 08.20h
El desarrollo humano (educación, salud y bienestar), cayó un 6,4% entre 2008 y 2011, más que la media nacional, según un estudio del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas
Andalucía es cada vez más pobre. Desde que estalló la crisis en 2008 hasta 2011 el índice de pobreza humana en la comunidad ha aumentado un 16 por ciento, el doble de lo que ha crecido en España (8%) en el mismo período. Sólo en Canarias y la Comunidad Valenciana
el hundimiento económico arroja peores indicadores en el ránking
nacional, con crecimientos máximos de 21 y 18 por ciento,
respectivamente. Pero ni siquiera esto sirve de consuelo. Andalucía sigue siendo la región con más pobres. Lo era incluso antes de que la crisis causara sus devastadores estragos. En las antípodas se sitúan la Comunidad Foral de Navarra, La Rioja y País Vasco, donde la pobreza bajó tras el pinchazo de la burbuja inmobiliaria en 2008.
Éste es el sombrío escenario que dibuja el estudio «Desarrollo humano y pobreza en España y sus comunidades autónomas» entre 2006 y 2011, elaborado por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE) y la Fundación Bancaja y presentado ayer en Valencia.
La pobreza, antesala de la exclusión social, se acentuó en Andalucía de forma generalizada. El estudio ha fijado el umbral de la pobreza
en el 60 por ciento de la mediana del gasto por unidad de consumo de
las personas, a diferencia de la estadística oficial que se basa en el
parámetro de los ingresos.
De la escalada de la pobreza no cabe culpar al Gobierno de Mariano Rajoy y a su estricta agenda de recortes. El estudio, elaborado por los catedráticos Carmen Herrero (Universidad de Alicante) y Antonio Villar
(Universidad Pablo de Olavide), pone de manifesto la zanja de las
desigualdades entre comunidades ricas y pobres, que se redujo levemente
durante el último periodo de bonanza, se ha ensanchado con la recesión.
El informe también analiza la evolución del desarrollo humano (que incluye salud, educación y bienestar material), que ha descendido un 4,4 % desde el inicio de la crisis, más en Andalucía (6,4 %) y menos en Cataluña
(2,7 %). Este índice se ha visto perjudicado en cuanto al bienestar
material pero, por el momento, educación y salud no notan los efectos
porque requieren de una recesión más larga.
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